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From Anarchopedia
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Símbolo de la anarquía

La palabra Anarquía viene del griego, el prefijo A, que significa “no”, “la falta de”, “la ausencia de”, o “la carencia de”, mas archos, que significa “soberano,” “director”, “jefe”, la persona a cargo de”, “comandante.” Los terminos griegos ANARCHOS y ANARCHIA quieren decir “no tener gobierno - estar sin gobierno” (Sigue...)
El Anarquismo es un nombre genérico dado a las teorías y movimientos que llaman a la abolición del gobierno y de toda forma de jerarquía y autoridad para conseguir la anarquía. Los anarquistas consideran que la sociedad podría ser mejor organizada sin un gobierno y proponen muchas maneras de hacerlo. Los anarquistas también discuten que las relaciones éticas solo pueden ser basadas en la asociación voluntaria. El anarquismo busca la total libertad del individuo.
La palabra Acracia (del griego α-, "no" y κράτος, "fuerza" o "violencia") por el diccionario es una "doctrina que niega la necesidad de un poder y autoridad políticos". Es una soociedad " caracterizado por la carencia de autoridad". Acracia y ácrata son usados como sinónimos de anarquía y anarquista respectivamente, pero la raíz del concepto no es la misma. Anarquía alude a la ausencia de un gobierno o Estado que dirija la sociedad, acracia alude a la ausencia de coerción y no es necesariamente contra de la jerarquía si se trata de un orden voluntario. Todos los anarquistas son acraticos, pero los acraticos pueden no ser anarquistas.

M. Bakunin

Esta obra, como todos los escritos que hasta la fecha he publicado, nació de los acontecimientos. Es la continuación natural de las Cartas a un francés, publicadas en septiembre de 1870, y en las cuales tuve el fácil y triste honor de prever y predecir las horribles desgracias que hieren hoy a Francia, y con ella, a todo el mundo civilizado; desgracias contra las que no había ni queda ahora más que un remedio: la revolución social.
Probar esta verdad, de aquí en adelante incontestable, por el desenvolvimiento histórico de la sociedad, y por los hechos mismos que se desarrollan bajo nuestros ojos en Europa, de modo que sea aceptada por todos los hombres de buena fe, por todos los investigadores sinceros de la verdad, y luego exponer francamente, sin reticencia, sin equívocos, los principios filosóficos tanto como los fines prácticos que constituyen, por decirlo así, el alma activa, la base y el fin de lo que llamamos la revolución social, es el objeto del presente trabajo (Sigue...)