Still working to recover. Please don't edit quite yet.

Autogestión

From Anarchopedia
Jump to: navigation, search

El término autogestión (significando administración autónoma) se refiere al uso de cualquier método, habilidad y estrategia a través a de las cuales los individuos puedan dirigir eficazmente sus propias actividades hacia el logro de sus objetivos. Incluye el establecimiento de metas, planificación, programación, seguimiento de tareas. También se conoce a la autogestión como proceso ejecutivo (en el contexto de un proceso de ejecución). La autogestión pretende el empoderamiento de los partícipes de una actividad u organización.


Autogestión y anarquismo

El término autogestión es muy amplio debido a la gran diversidad de interpretaciones que posee, en diferentes campos, en lo político y en lo económico, sin embargo tomaremos la definición de “el derecho a la autonomía personal”. La autogestión entonces podemos diversificarla con términos como autogobierno o autocontrol, y a través de planteamientos como el “hazlo tu mismo” o “do it by yourselft”. [[Archivo:Diy.png|thumb|Do It Yourself (Hazlo tu mismo)]] El anarquismo no escapa entre las doctrinas autogestionarias, incluso es uno de los dos movimientos sociales esenciales que se opusieron al capitalismo triunfante del siglo XIX junto con el marxismo. En el anarquismo la autogestión es uno de los principales fundamentos, y esto tienes su explicación: en una sociedad heterogestionada, representada por el poder burocrático y el gobierno del hombre por el hombre, se le niega al individuo, estudiante, obrero, campesino, funcionario, la posibilidad de utilizar su potencial al máximo, por una sola razón, este individuo no es totalmente libre, esta subordinado y no puede desenvolverse plenamente.

La independencia individual que otorga la autogestión beneficiará al individuo en el ejercicio de su libertad siempre y cuando vaya de la mano de los principios colectivos de solidaridad y apoyo mutuo. Esta sociedad mutualista o colectivista de individuos y/o grupos autogestionados garantizara la funcionalidad de la estructura horizontal.

La autogestión no queda como un asunto meramente teórico: los diferentes consejos obreros como los soviets, los consejos de fábrica italianos, en Alemania, en las democracias populares, la revolución húngara de 1956, el socialismo africano, la autogestión yugoslava, la argelina, y la autogestión española de 1936-1939, los squatters, todas estas experiencias basadas en los principios de la autogestión.

La práctica de la autogestión

Autogestión signifca asambleas y reuniones populares, en que el objetivo es la resolución de conflictos y problemas de una comunidad sin imposiciones pero con el consenso. El sitio web Autogestiónate ofre algunos consejos para una buena autogestión:

Facilitación

En reuniones de más de diez personas más o menos resulta muy útil nombrar una persona para que sea facilitadora. La idea es contribuir a la buena marcha del grupo (no expresar su opinión o influir en la de otras) y cuidar los aspectos técnicos y organizativos.

La facilitadora está ahí para vigilar el proceso de comunicación dentro del grupo, el clima de la sesión, los roles que existen etc, y para fomentar la participación de todas y animarla si no se produce.

Facilitar no significa liderar ni dirigir, sino tomar la responsabilidad de ayudar al grupo a llegar a los objetivos que se ha marcado, dependiendo de la situación esto puede incluir

  • Asegurarse de que está claro qué estructura y proceso va a tener la reunión
  • Mantener la concentración de reunión evitando que se salte de un punto a otro o digresiones
  • Tratar todos los puntos del orden del día, tomar las decisiones necesarias
  • Ajustarse al tiempo
  • Llevar la reunion de manera eficaz, participativa y respetuosa
  • Asegurar la participación de todas
  • Clarificar y resumir puntos, presentar las decisiones y formalizar cuando se llega a un acuerdo
  • Ayudar al grupo a lidiar con los conflictos
  • Asumir la responsabilidad de dinamizar la reunión con preguntas, propuestas, dar la palabra y controlar los tiempos que la gente habla.

¿Quién facilita?

Hay diversos criterios. se puede tener en cuenta su grado de implicación en los temas que se van a tratar, siendo preferible que la facilitadora esté poco implicada en los temas que se han de tratar, le será más fácil estar a su tarea y no dirigir la asamblea y ser más ecuánime en los debates.

También puede tener en cuenta las capacidades de cada una para moderar, o asumir que la práctica hace la perfección y rotar.

Espacio mental para la facilitación

Anarchy symbol neat.png
  • Neutralidad en los temas a tratar; si tenemos una opinión fuerte sobre un punto a veces es mejor ceder temporalmente la facilitación a otra persona (puede ser difícil no dirigir el debate hacia nuestro punto de vista)
  • Energía y atención: aunque no lo parezca facilitar es un trabajo difícil que requiere mucha atención y energía mental. si estamos en un día malo o bajas de energía puede resultar difícil.

comprensión de lo que el grupo quiere de la reunión y del carácter y valores general del grupo empatía y habilidad para escuchar

  • Seguridad: a veces habrá que cortar a alguien, o resumir el argumento de otra persona, o hacer propuestas para dirigir el proceso, y esto requiere un grado de seguridad en una misma
  • Respeto por todas las participantes, e interés por lo que cada una puede ofrecer
  • Ser capaz de entender tanto el contenido de la discusión como el proceso, y las emociones de los individuos y el grupo.

Consejos

Aquí una ensalada de consejos. No se trata de que siempre haya que tener esto en cuenta ya que hay muchos tipos de reuniones y de grupos.

En general:

  • Tener clara la estructura de la reunión y los tiempos, y ceñirse a ella
  • Asegurarse que la presentación de cada punto está clara
  • Recoger todas las opiniones y animar a la participación
  • Cortar discusiones reiteradas, y las repeticiones de un mismo argumento
  • Asegurarse de que hay acuerdo, y de que quede claro cuál es la decisión
  • Hacer síntesis de las opiniones surgidas en los debates
  • Buscar puntos de acuerdo
  • No asustarse ante situaciones difíciles
  • Cuidar el tono de la reunión, prestar atención tanto al contenido como al proceso
  • Intervenir cuando es necesario, a la vez que lo menos posible, y siempre con respeto (es un arte).
  • Alternar herramientas y métodos (juegos, discusiones, puntos cortos, puntos filosóficos) ya que la continuidad cansa la mente
  • Crear una atmósfera segura y de confianza
  • No pasar por alto intentos de dominación, interrupción, arrebatos de culpa y faltas de respeto
  • Ser positivas, visibilizar el progreso

Antes de la reunión:

  • Preparación: Tener un borrador de agenda, estimar cuánto tiempo va a tomar cada punto. Tener en cuenta las prioridades del grupo (hay puntos que se pueden tratar más adelante o en grupos de trabajo_). Pensar en herramientas efectivas para tratar puntos difíciles. Situar puntos difíciles hacia la mitad de la reunión cuando el grupo está metido en ella pero aún no cansado. alternar puntos cortos y largos. agrupar puntos si tiene sentido (por ejemplo: puntos cortos de información uno detrás de otro, puntos que tienen que ver con logística todos juntos). planear las pausas, planear una evaluación al final si es necesario, planear actividades para subir la energía, como juegos/dinámicas.
  • Escribir la agenda propuesta en una pizarra o similar para que todas la puedan consultar durante la reunión.
  • Tener en cuenta el espacio físico y su comodidad, que todas puedan ver y oir lo que pasa.
  • Reunir los materiales necesarios para la reunión -tiza, rotulador, papelógrafo...
  • Pensar en una facilitadora sustituta en caso de que una se tenga que ir por una emergencia o necesite una pausa.

En la reunión:

  • Presentarse..
  • Introducción a la reunión (si hace falta/es un grupo nuevo...) si hay gente nueva o no todas se conocen está bien empezar con una ronda de introducción, y animar a la gente a que no sólo diga su nombre, sino por ejemplo por qué están en la reunión, o qué cosas están haciendo que les ponen en relación con el grupo...
  • Definir el proceso: explicar los objetivos de la reunión, el tiempo con el que contamos, nuestras responsabilidades de facilitación, qué conductas son inaceptables para el grupo (por ejemplo que la gente no puede hablar sin pedir la palabra, ni ser irrespetuosa/machista...)
  • Presentar la agenda, abrir una ronda de comentarios y hacer cambios si es necesario (pero tener cuidado con pasar media hora discutiendo si usar 10 o 15 minutos para tratar un punto)
  • Señalar otros roles.
  • Tratar los temas uno por uno. Mantener la concentración del grupo en cada punto hasta que se llegue a una decisión (que en caso extremo puede ser dejarlo para otro momento).
  • Asegurarse de que se toman decisiones claras y concretas. En el caso de decidir una actuación asegurarnos de que queda claro quién cómo y para cuándo.
  • Si surgen nuevos puntos de discusión asegurarse de que se recojan para tratarse más tarde (o en otra reunión)
  • Invitar a la discusión, clarificar/enunciar las propuestas cuando salgan.
  • Abrir la discusión para asegurar que se llegue a una decisión que recoja el potencial del grupo (no la decisión que alguien tiene muy clara y enuncia como “lo mejor” desde el principio.
  • Asegurar la participación de todas,
  • Estar receptivas a la onda del grupo, niveles de energía, interés en el tema, si se están cumpliendo los objetivos de la reunión, si la estructura es apropiada...
  • ¡Prestar atención al tiempo!
  • Al final: hemos quedado en lugar y fecha para la próxima reunión? resumir los logros y dar a la reunión una “guinda” positiva.
Black flag waving.png

Para facilitar el trabajo de facilitación se pueden introducir otros roles, por ejemplo:

  • Cofacilitadores: podemos tomar turnos para facilitar, o repartir los aspectos de la facilitación, por ejemplo que una persona se ocupe de dar la palabra.
  • Termómetro de emociones: una persona que no esté facilitando activamente puede encargarse de prestar atención a la atmósfera de la reunión y cómo se están sintiendo las personas. En situaciones de conflicto puede intervenir mediando, o señalando que la atmósfera se está cargando, o sugiriendo recesos.
  • Reloj: presta atención a los tiempos, e interviene cuando se ve que nos estamos alargando mucho en un punto, y reareglando los tiempos en la agenda si es necesario.
  • Notas: a veces se toman notas de las decisiones, y de la distribución de las tareas que se asignan en la reunión
  • Logística; en reuniones grandes se asigna a una persona para coordinar el lugar, equipo, bebida/comida si hace falta.
  • Alguien que se encargue de invitar a la gente en la reunión al principio y tras las pausas.

Otras aplicaciones

Otras aplicaciones del término "autogestión" tienen algunas particularidades más específicas, algunos de estos usos están circunscritos a ciertos ámbitos técnicos y culturales restringidos.

  • Autogestión en medicina y asistencia sanitaria, la suma de intervenciones, entrenamiento y habilidades por las que los pacientes con alguna dolencia pueden cuidarse a sí mismos efectivamente o aprenden a hacerlo.
  • Autogestión obrera, la toma del gobierno de una sociedad y la colectivización de su economía por parte de una corporación obrera o sindical.

Véase también

Enlaces externos

Notas

Categoría:Anarquismo